OCEAN COLOR SCENE

En la época de constantes cambios que vivimos, no hay demasiados grupos que tengan la suerte de poder celebrar, en plena actividad, el décimo aniversario de su creación. Eso es exactamente lo que conmemora, en pleno 2000, OCEAN COLOR SCENE. Coincidiendo con una ocasión tan especial, el cuarteto de Birmingham publica su cuarto álbum, “One From The Modern”, el 20 de septiembre del pasado año. Compuesto por 11 temas, el álbum, lleno de madurez y pasión, nos muestra a OCS con una creciente sensación de confianza en si mismos. Cada tema refleja una evidente fuerza interior y un marcado sentido del deber cumplido. Ya el simple hecho de permanecer juntos durante diez años es todo un logro en si mismo. Son de sobra conocidos los problemas y dificultades que han debido superar a lo largo de su carrera. La suya es una historia formada por dos partes bien distintas: una incluye su primera etapa como grupo, con el lanzamiento de su primer álbum, “Ocean Color Scene”, con el sello Fontana. Fue el momento en el que el manager del grupo se vio sumido en la bancarrota y tuvo que volver a hipotecar su propia casa quedándose tan sólo con una enorme seguridad en las posibilidades de futuro de OCS. Aquella etapa también incluye las enormes dificultades a las que se enfrentaron Steve y Damon junto con Paul Weller para buscar la financiación que necesitaba el grupo durante aquellos primeros años. La segunda parte de su historia se inició con un importante cambio de sentido en su carrera y con la llegada de momentos mucho más afortunados. Las cosas empezaron a cambiar con el lanzamiento de “Moseley Shoals”, un álbum que consiguió unas ventas millonarias. El hecho de haber permanecido más diez años juntos se ha debido sobre todo al compromiso y la unión que han mostrado tanto en los malos momentos como en la cumbre de su éxito, a lo que se une el evidente talento individual de sus componentes y su capacidad colectiva para llegar al corazón y al alma del público. A lo largo de su historia, OCS no han abandonado sus convicciones ni un solo instante. Puede que el suyo no haya sido un éxito fulminante e inesperado, pero el esfuerzo que han desarrollado durante años ha dado sus frutos. Si alguien lo duda, sólo tiene que echar un vistazo a las cifras y los datos: El álbum “Moseley Shoals”, publicado en 1996 (el segundo de su carrera) permaneció en el Top 10 de la lista de LPs de Inglaterra durante más de seis meses, y hasta ahora ha vendido más de 1.2 millones de discos. El tercer álbum, “Marchin Already”, publicado en 1997, arrebató el número 1 de las listas a “Be Here Now” de Oasis, y está a punto de convertirse en triple platino. “B-Sides Seasides and Free-Rides”, una recopilación de grandes éxitos de edición limitada (se publicaron únicamente 200.000 copias) formada por caras B, se vendió totalmente en tan sólo un mes. A nivel internacional, países como Japón, Suecia y España han sido testigos de unas ventas impresionantes de los discos de OCS, por no hablar de la impresionante historia que podemos encontrar en lo que se refiere a las actuaciones en directo del grupo. El año 1998, OCEAN COLOR SCENE realizaron una gira de conciertos, con llenos absolutos en cada uno de ellos, por las principales ciudades del Reino Unido. Se convirtió en la gira de mayor éxito que realizó un grupo inglés en 1998. La banda también actuó tres noches en el castillo Stirling de Escocia frente a más de 30.000 personas en agosto del año pasado. Aquel resultó un momento especialmente importante en cuanto al número de espectadores, puesto que ni siquiera los grandes festivales que se realizaron durante el verano en Inglaterra fueron capaces de superarlo. Por si fuera poco, incluso las entradas para la breve gira de 30 días que el grupo ofreció para su circuito de fans se vendieron en apenas unos días, incluso en locales tan importantes como Catatonia, que otros grupos fue