MALAS LENGUAS
A morir que son dos días
Hay una afirmación que nadie se ha parado a pensar tan siquiera un momento y que se dice muy a menudo en las escuelas por ejemplo, sin que nadie la ponga en duda: “el ser humano es inteligencia a diferencia de los animales”.
Ahí hay algo que falla o no consideramos a todos los de nuestra especie. Suponiendo que sea la segundo, digamos que un ser no muy dado al uso de su intelecto ha colocado todas las asignaturas gordas de la carrera en el mismo cuatrimestre, con lo cual, me llevo en la facultad desde que canta al gallo hasta que pasa el camión de la basura. Cuando llego a mi casa, así pues no tengo muchas ganas de hacer nada, pero aún así tengo que hacer los trabajos “voluntarios” que me han mandado.
Lo de voluntarios entrecomillado tiene su explicación: mi bien amada madre, siempre me ha dicho que voluntario ni a coger billetes de mil duros (haced la cuenta en euros) y yo fiel a sus consejos no solía hacerlos (que coño, no los hacía nunca) y mis compañeros tampoco por solidaridad con el grupo, pero es que en la universidad todo cambia, ya no eres como en el instituto “el que ha entregado el trabajo voluntario”, si ahora no lo entregas eres “el que NO ha entregado el trabajo voluntario”, algo que te coloca en la primera fila del paredón en fechas de exámenes (al menos de entrada).
Es por eso que actualizo poco el blog y también es por eso que tengo un tic en el ojo según me han dicho del estrés acumulado. Como me quedo allí, suelo comer porquerías varias, aunque intento evitar por todos modos la “comida” de la cafetería (pese a que nos divirtamos con el juego “adivina que es lo que me estoy comiendo”), con unos efectos a largo plazo que si no me imposibilitan que escriba, contaré en un futuro no muy lejano.
Lo mejor de todo esto, es que luego en las asignaturas nos cuentan como la Educación Física lleva a la Salud, y estamos todos con el estómago reventado (algunos el hígado también de las fiestas de los viernes), sin apenas dormir y estresados. Pero vamos, que no sé para que digo nada, si el primer día nos dijeron que no había que etiquetar a nuestros futuros alumnos, y por el hecho de ser de “Educación Física” nos escupen. O cuando dijo aquella que no faltaba, y ha faltado más que nadie, o que se lo curraba y no hacía nada. O aquel que dijo que no aceptaba crítica y 10 minutos más tarde dijo que el profesor debía de aceptarlas para mejorar. O aquella que hablaba de hacer una clase entretenida que motivara y la gente se quedaba dormida…
Con la soga al cuello, mil trabajos por hacer que mañana serán dos mil, pero hoy, voy a jugarme unas partidillas al fútbol y que me quiten lo bailao aunque mañana tenga tics en los dos ojos o no tenga ojos. Eso sí los jugaré rapidito que voy bastante atrasado.