MACACO
Lo natural es la mezcla. Cuando en 1997 Macaco El Mono Loco decidía poner en marcha un proyecto tan cosmopolita como su ciudad, ya intuía que el futuro pasaría por el diálogo multicultural, por la comunión de palabras y sonidos, de aromas y olores, de gustos y sabores.
No se trata sólo de que Robert Trujillo (Ozzy Osbourne, Metallica), Mucho Muchacho (7 Notas 7 Colores), Amparanoia o Dusminguet dejaran su impronta en su debut. Ni tampoco que El Mono en el Ojo del Tigre (Edel, 99) -que así se llamó- se editara también en Francia, Italia, Bélgica, Suiza, Suecia, Holanda, Austria y Argentina. Ni siquiera que David Byrne remezclara Delaveraveraboom y que invitara a Macaco a producir y mezclar a Los de Abajo o King Changó. Es una banda donde confluyen el talento y el bagaje de una serie de músicos procedentes de Brasil, Cuba, Venezuela, Camerún, Zimbabwe y, por supuesto, España.
Con Ojos de Brujo, Chico Ocaña (Mártires del Compás), el italiano Roy Paci (Mau Mau, Radio Bemba), el brasileño Lenine o los senegaleses Touré Kunda como invitados de excepción, Rumbo Submarino (Edel, 01) obtuvo excelentes críticas y se presentó en los principales festivales europeos, del Womad al Grec, del Popkomm a La Mar de Músicas, del Couleur Café al Etnosur. Tras más de setenta conciertos en 2002, Macaco El Mono Loco aún tuvo tiempo de trabajar con Ojos de Brujo en “Barí”, con Carlos Jean en “Back To The Earth” y con Amparanoia en “Enchilao”. Y de participar en las bandas sonoras de “Amnesia” (02), de Gabriele Salvatore (Óscar a la Mejor Película Extranjera por “Mediterráneo”), “Darkness” (02), de Jaume Balagueró (Mélies de Oro en el Festival de Sitges por “Los sin nombre”) y “A más” (02), de Xavi Rivera, donde interpreta un pequeño papel junto a la actriz Najwa Nimri.
Sin pausa pero sin prisa, reforzándose con la presencia de DJ Tillo (Skratch Komando) a los platos, Jules Bikôkô (bajo, voces y composición), Wicho Rodríguez (piano), Sandro Lustosa (percusión), J.A. Mato (batería) y Paul de Swardt y Rey Ul como MC´s de apoyo, Macaco ha fundado su propia editorial (El Murmullo) y su propio sello discográfico, Mundo Zurdo, para entregar un disco que son dos, Entre raíces y antenas (2004).