LENDAKARIS MUERTOS
Provocan desde su afortunado bautismo: Lendakaris Muertos, escrito tal cual. Evidentemente, es un homenaje a los Dead Kennedys, una de sus influencias. «Sí, el nombre viene de los Dead Kennedys y lo adaptamos a la zona vasca. Lo de escribir lendakaris sin ‘h’ fue premeditado. Supongo que para que quedara más punki», observa el portavoz, Txema, una de las cuatro patas del banco, a saber: Aitor Ibarretxe (voz), Asier Aguirre (guitarra), Txema Garaikotxotxea (bajo) y Potxeta Ardanza (batería). Ah, y se han compuesto un himno para ellos mismos, que reza tal que así: «No tenemos DJ/Ni gafas de pasta/Sólo somos 4/y con los 4 ya nos basta/No tenemos ruiditos/tampoco doble bombo/somos lo más modernos/somos Lendakaris Muertos/ Estamos aburridos/Somos Lendakaris Muertos/Somos vascos malos/Somos Lendakaris Muertos». Pues eso.
Los navarricos le zumban a la cosa política, se cachondean de los colegas, caricaturizan las drogas, la policía y el fútbol, y tú te tronchas mientras rockean con el vigor rock-a-roller de los mejores MCD, la acidez mental de La Polla más inspirada, las parrafadas sociales de Def Con Dos, los arrebatos kalimotxeros de Tijuana In Blue y el punk-rock coral de Segismundo Toxicómano, ahí es nada. Ya hemos hecho la crítica musical; más adelante comentaremos los textos.
Los Lendakaris son de Pamplona y rondan los treinta años, «aunque con el nuevo fichaje habrá subido un poco la media. Empezamos en febrero de 2004. Fue idea de los gemelos Asier y Aitor, con los que coincidí en otro grupo. Decidieron montar algo exclusivamente para pasarlo bien. Un grupo exento de virtuosismos musicales para recuperar el espíritu del rock radical vasco. Les dije que adelante y llamamos a gente para tocar la batería. ‘¿En un grupo punki? Paso de esa música’, respondieron todos. Entonces se nos ocurrió que podía tocar mi hermano Iñaki. Grabó la maqueta, pero no el disco porque se marchó a vivir fuera».
Los tres benjamines han pasado por grupos maqueteros que hacían «más de lo mismo», pero «el batería es una vieja gloria del punk que tocó en Tijuana In Blue y Ultimátum». Sus influencias son diáfanas: «Vienen del rock radical vasco, de grupos que escuchábamos en nuestra alcoholizada adolescencia: La Polla, Eskorbuto, Cicatriz, R.I.P., Vómito, etc. Y las extramusicales son la vida misma. Como suelen decir los gemelos: ‘te das una vuelta por el centro comercial y sacas letras para unas cuántas canciones’».