CLON 251
En la primavera del año 98, el ex componente del grupo “Athanatos”, David Rivero, contactó con el ex componente de “Pitusa Cola”, Jaime Echuaca, con la idea de formar una banda con influencias metálicas actuales. Buscaron como compañeros de viaje a componentes de otros proyectos locales; hablamos de Raúl Sánchez y Alejandro Marrero, empezando a trabajar como banda seria en verano del mismo año. Debutaron oficialmente en diciembre del 98 en el “Festival de Solidaridad” de Maspalomas (Gran Canaria), su ciudad de origen, junto a bandas locales y al grupo de Tenerife “Las Ratas”. Tras varios cambios en su formación se incorporó al grupo José Luis Jiménez, un baterista de su misma ciudad el cual tenia una larga trayectoria por haber tocado con muchas bandas de la isla como por ejemplo: “EL Señor X”, o por su colaboración como batería del grupo “Enac Ska”(grupo ganador del “Imagina Rock” de Cadena 100 a nivel nacional) en su gira por las Azores y Madeira.
Después de varios años trabajando en el local de ensayo y tras la autoedición de su primer trabajo discográfico, “Nôa”, suceden dos cambios importantes en Clon 251. El cantante Jaime Echuaca abandona el grupo y queda Alejandro Marrero como único vocalista. Además incluyen nuevos sonidos aportados por José Antonio Arencibia con sus teclados y samples, un músico con una trayectoria larga que había dado sus primeros pasos en la música con José Luis. Como comenté cuando hablé de otra banda canaria hace pocos días, a Clon 251 no le ha tocado otra opción que apostar por la autogestión debido a la preocupante situación coyuntural del entorno discográfico, ya que llevamos unos años en los que ni las independientes que a finales de los noventa corrían ciertos riesgos, ni las grandes compañías, con sus cargos directivos con contratos blindados culpando a la piratería de la crisis del sector, apuestan por grabar a nuevas bandas.
José Luis Jiménez nos remitió su primer álbum y nos informó que Clon 251 ahora mismo están en fase de composición de nuevos temas y de momento han dejado de ofrecer conciertos, después de haber sacado el primer disco a principios del año 2003. “Nôa”, el debut, propone rock metálico cantado en Castellano que se hermana con muchas propuestas de la península, pero sobre todo con formaciones anglosajonas. La temática de su lírica es universal, al narrar situaciones que se pueden dar igual en el sur de la isla o en el extrarradio de Madrid desde el momento que reflexionan, casi a lo largo de todo el álbum, sobre desavenencias sociales y culturales. Clon 251 manejan buenas ideas y arrojan sentimiento y entrega en lo que hacen, aunque desde mi punto de vista tal vez no profundizan demasiado en el desarrollo de la personalidad del colectivo (que la tienen) y se dejan influir, en exceso, por propuestas coetáneas que marcan hoy en día el devenir de la escena metalera. Quiero decir que las canciones tienen vida por si solas o no la tienen, sin necesidad de estar rompiendo constantemente las estructuras sin un guión sólido que lo justifique. Cuando Clon 251 consiguen “cerrar” mejor las canciones, registran visos de carácter que hacen prever que si siguen trabajando ajenos a lo que hay alrededor podrán encontrar su hueco y sonido propios. Sin embargo, cuando Clon 251 suenan a terrenos ya transitados por otras bandas, se disipa la personalidad del grupo.